Que un político cobre 6.000 euros al mes no es algo tan extraño. Lo que sí es raro es que llevando en el mundillo de los trajes, maletines -conste, no va con segundas- y hemiciclos nada más que veinte años, tan solo haya ahorrado 900. Y es que esta semana la cosa va de sueldos. Hablamos, cómo no, de Francisco Camps, presidente de la Generalitat valenciana, y declarado mileurista desde ayer. Su cuenta personal no llega a los 1.000 euros, vive en un piso de lo más normal y su coche roza la declaración de antigüedad.